Siempre es motivo de alegría una celebración, especialmente una boda, qué decir cuándo lo que se celebra es el "amor imperecedero". Hoy nos hemos unido a la ilusión y gozo, de Mariano y Carmen, en la celebración de sus 50 años como esposos.
Damos gracias al Señor por la felicidad que nos produce poder contemplar en parejas como esta, que nos demuestran que el amor es fundamental pase el tiempo que pase, pase el tiempo cómo pase.
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